Llevo varios meses haciendo estos cestitos en mis ratos libres (que son pocos, pero bien aprovechados). Estan hechos a ganchillo y con bolsas de plástico de los supermercados, aunque no lo parezca, de varios colores y texturas.
Los pequeños son muy divertidos para accesorios del baño, para los frutos secos en la cocina, para joyero en la mesita de noche, para las llaves, para los colores en el escritorio, y para muchas cosas más.
Los grandes se pueden utilizar como cesto de la ropa, yo tengo uno en el baño de mi casa de pueblo y es muy práctico para las toallas mojadas. Cada uno puede encontrarle la utilidad que quiera, y solo queda elegir los colores que más te gusten.
Es una buena forma de reciclar las bolsas de plástico, no crees??
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